Mtra. Sara Esteban
Cabrera
Habermas expone un
esquema filosófico que permite ver a la sociedad de dos formas diferentes de racionalizar para su análisis: la
racionalidad sustantiva del mundo de la vida y la racionalidad formal del
sistema, pero en donde el mundo de la vida representa una perspectiva interna
como el punto de vista personal de los sujetos que actúan para y sobre la
sociedad y el sistema representa el
punto de vista externo como estructura contenedora de estas fuerzas de carácter
social.
Habermas reduce los
tipos de acción que se emanan de las relaciones sociológicas de los individuos
agrupándolas de esta manera:
Acción teleológica en este retoma el punto de vista
Aristotélico referente a la acción.
Acción regulada por normas en este se refiere a los miembros de un grupo social que orientan
acción por valores comunes.
Acción dramatúrgica en este dice Habermas que el actor transmite en su público determinada
imagen de él, y pone de manifiesto su subjetividad.
Acción comunicativa en este se refiere a la interacción de dos sujetos que desarrollan su
lenguaje y su acción en una relación interpersonal.
Habermas se apoya en la acción comunicativa de manera significativa,
aludiendo que es “una interacción mediada por símbolos que tiene como núcleo
normas o reglas obligatorias de acción y esta acción genera conductas formando
así un marco social que contrapone los sistemas
de acción.
Habermas propone una teoría de la acción comunicativa que divide en
tres partes, para Habermas “tres mundos”, mundo objetivo, mundo social y el
mundo subjetivo.
En el mundo objetivo se entablan relaciones pragmáticas como
totalidad de las entidades.
En el mundo social se entablan relaciones interpersonales
legítimamente reguladas.
En el mundo subjetivo se entablan las relaciones como la
totalidad de vivencias propias que se pueden publicar o difundir realmente
ante cualquier persona hablante.
Habermas estudia a las
sociedades como una masa de sistemas complejos donde el ser social desaparece
transformado en procesos y analiza al
ser social como un creador subjetivo.
La obra del sociólogo Niklas Luhmann,
hace referencia a la elaboración de una súper teoría, en donde no se proyecta a
reproducir la realidad, pero sí intenta entregar una respuesta general de la
sociedad. Asumiendo que todo sistema es superior y diferente a sus partes que
la componen, y que todo es la suma de sus partes.
Refiere Luhmann que un sistema es una fuerza sinérgica que se
refiere a la totalidad de un fenómeno social que no es igual a sus partes, sino
que es diferente entre ellas mismas e inclusive superior y que está contenido
por otros subsistemas y cuenta con tres subdimensiones:
La
elemental, la estructural y la sistémica, en la primera todos los sistemas forman parte de un
conglomerado desde el poder legislativo hasta el ejecutivo y el estado, la estructural que
dice que es la relación que se establece entre los elementos en que se tomará
para análisis y la sistémica que engloba las posiciones antes referidas, es
decir, se refiere al conjunto de todos los sistemas contenidos que, a su
vez, están conformados de subsistemas y quedan definidos estos subsistemas por
las interacciones de los individuos entre estos subsistemas existen diferencias
que hacen su divisiones y estas divisiones están definidas por las
interconexiones y relaciones entre todos los subsistemas.
Los elementos son elementos y solo dentro de sus respectivos
sistemas pueden existir a este sentido
le llamó autopoiesis.