GACETA JURIDICA UVM SAN ANGEL

miércoles, 30 de mayo de 2012

La responsabilidad, tierra fértil para el cultivo


Por Agricultor 
(Rodrigo M. Vilchis)

(Este ensayo obtuvo mención honorífica en el concurso institucional de la Universidad del Valle de México "El valor de ser mejor" en diciembre de 2011)

Al concluir una jornada académica,mientras salía del auditorio, una alumna se acercó y me preguntó el motivo por el cual cada vez que finalizaba la intervención de alguna autoridad decían: “Universidad del Valle de México, por siempre responsable de lo que se ha cultivado1”.
Le expliqué que ésees el lema de la institución. “Es una metáfora”, continué, “la Universidad es como la tierra fértil que recibe a la semilla de los alumnos que estudian allí”. Luego le dije, “los docentes y el personal administrativo cultivamos la simiente con el abono de la responsabilidad para cosechar el fruto, para formar gente también comprometida, sensata, madura”. Pero las preguntas siguieron. “¿Y qué es la responsabilidad?” siguió cuestionando.
Tomé un poco de aire para oxigenar mejor la mente y proseguí. “La responsabilidad es cumplir con el deber. Es la respuesta que deben hacer todas las personas, por ejemplo, las vinculadas a la escuela, cada cual en su propia área2. Es prever las consecuencias de nuestros actos3, es responder a nuestras propias obligaciones”.Luego, añadí, “así, el que limpia los salones, barriendo, el que captura las calificaciones, procesando la información, el que imparte clases, enseñando”. Creí que me había librado de filosofar pero las preguntas seguían insistentes como el flujo de una cascada. “Maestro”, continuó, “¿la responsabilidad es sólo para los maestros?” Evidentemente mi respuesta fue inmediata y un tanto acalorada: “Cumplir cada día con nuestros deberes es un principio que pretendemos inculcar a todos los alumnos no solo con nuestra palabra, sino que también con nuestro ejemplo. Por eso, antes de exigirte el cumplimiento de tus tareas o motivar al grupo a estudiar, habrás notado que yo prácticamente nunca falto, que siempre llego puntualmente a mis clases, que registro las evaluaciones en las fechas definidas y que solo me voy de vacaciones cuando el calendario me lo permite, por mencionar solo algunas de mis obligaciones, ja, ja, ja”. Intercambiamos sonrisas. Ella se despidió con una expresión alegre mientras yo disimulaba un gesto de asombro.
Entonces pensé que había satisfecho la curiosidad de una persona pero en realidad me había generado una avalancha de cuestionamientos posteriores. Me pregunté si yo podría asumir la responsabilidad de la formación de mis alumnos más allá de su estancia escolar, si cuando los viera en el ejercicio de su profesión podría detectar mi influencia en su desempeño profesional. Seguí reflexionando por el camino mientras me retiraba a descansar a casa.
Al otro día, como de costumbre, me presenté en los juzgados para realizar una diligencia. Mientras concluía el trámite con un funcionario, esa mañana se me acercó un joven abogado. Para mi sorpresa dijo haber sido mi alumno. En realidad yo no lo recordaba. Tuve que preguntarle su nombre y la época en la que asistió a mis clases para evocar algunas señales que pudieran refrescar mi memoria. Comencé a ruborizarme cuando me explicó que no había sacado una buena calificación en el examen de Filosofía del Derecho que le había aplicado. Entonces lo recordé. Así, mientras yo intentaba controlar mis emociones, entre pena y risa, admirablemente me manifestó su agradecimiento por haberlo motivado a estudiar y me explicó cómo en aquella ocasión no había podido aplicarse de modo correcto por especiales situaciones personales. Esa mañana, mientras concluía mi asunto, pude observar con detenimiento la dedicación que él estaba proporcionando a su propio cliente. ¡Cómo le explicaba con toda claridad la situación jurídica del asunto y las alternativas de solución!Al modo de un relámpago recordé la frase de Aristóteles “La educación tiene raíces amargas, pero sus frutos son dulces4”. ¡Cómo éste muchacho que había sido mi alumno al fin había asimilado y puesto en práctica la auténtica Lógica Jurídica!
Este hecho me hizo pensar nuevamente en el lema de la universidad “Por siempre responsable de lo que se ha cultivado5”. De ahí que, en mi opinión, todos los maestros y el personal administrativo,por el simple hecho de laborar y cumplir sencillamente con el deber cotidiano, actuamos de modo responsable, como la tierra fértil para el cultivo de la semilla de nuestros estudiantes.

Bibliografía sugerida:
Aguayo, Enrique (2004). Ética General, Parroquial, México, D. F.
Borbolla de Niño de Rivera, Julia (2000), Profesión: mamá. Una guía para ejercerla. México, Diana.
Castellanos Hernández E. (Coordinador). (2011) Valores para una cultura de la legalidad, Secretaría de Gobernación, México, D. F.
Coletti, Maurizio y Linares, Luis. (Compiladores) (1997). La intervención sistémica en los servicios sociales ante la familia multiproblemática. La experiencia de Ciutat Vella, Paidós, Barcelona, España.
De Finance, Josep (1966). Ensayo sobre el obrar humano, tr. Albino loma, col. Biblioteca Hispánica de Filosofía, s/n, Ed. Gredos, S.A., Madrid, España,
Estañol Vidal, Bruno (2002). La violencia. En Muñoz De Alba Medrano, Marcia, coordinadora. Violencia Social. Serie Estudios Jurídicos, núm. 31. 2002. México. Universidad Nacional Autónoma de México. Instituto De Investigaciones Jurídicas México D. F.
Grass Salomón, S. (2002). Diccionario de máximas y refranes, Trillas, México,
D. F.
Morris, Charles G. (1985). Psicología. Un Nuevo enfoquex, Prentice Hall hispanoamericana, S.A., 5a edición, México, D. F.
Páginas electrónicas:
http://www.uvmnet.edu/civ/
http://www.uvmnet.edu/wtempo/uvm_hoy/lema2.asp?menu=10
http://www.uvmnet.edu/wtempo/uvm_hoy/valores2.asp?menu=10
http://gacetajuridicauvm.blogspot.com/


Notas:
1 Recuperado el 25 de octubre de 2011 de:
http://www.uvmnet.edu/wtempo/uvm_hoy/lema2.asp?menu=10 recopilado el día 25 de octubre de 2011.
2 Recuperado el 25 de octubre de 2011 de:
 http://www.uvmnet.edu/wtempo/uvm_hoy/valores2.asp?menu=10
3 Castellanos Hernández E. (Coordinador). Valores para una cultura de la legalidad. México, D. F., Secretaría de Gobernación, 2011, p 52.
4 Grass Salomón, S. (2002). Diccionario de máximas y refranes. México, D. F. Trillas, p.189.
5 Op. cit., http://www.uvmnet.edu/wtempo/uvm_hoy/lema2.

“Que los adultos acudan a clases puede ser objeto de prejuicios injustos”



Por Gerardo Adrián Orozco González. Edición: Rodrigo M. Vilchis

Debo reconocer que tardé en elegir el tema. Tomé más tiempo de lo común, ya que  no pude conseguir un libre ejercicio del pensamiento. Como adulto, mis quehaceres laborales, mis obligaciones domésticas y ahora la carga académica, absorbe todo mi tiempo.
He elegido un tema controvertido ¿Qué es una injusticia? ¿Dónde la he visto?
En lo personal, yo considero que uno de los más importantes  problemas de la sociedad es la discriminación. Puede ser por la clase social.   La historia de Roma ilustra  claramente este concepto. Era el  mismo Emperador quien marcaba la línea para distinguir quién debía de ser considerado como elegido en una clase social acomodada y el destino del resto de la población.
No es muy diferente la situación al día de hoy. De hecho, lo único que se abolió en este hemisferio, fueron los títulos de nobleza. Pero aun sin ellos se brindan privilegios a quienes lucen distintos al resto de la población.
Me permito ejemplificar esta situación con una breve historia real ocurrida a las afueras del campus de nuestra universidad. Los que estudiamos en programas ejecutivos, es decir, para adultos, salíamos de la escuela preocupados por las actividades académicas y las laborales. En ese lugar encontramos a un alumno joven, figura pública y conocido, ya que trabaja como actor en la televisión. Salía al igual que nosotros del campus. Es claro que, por el contexto, en la escuela nos convertimos en una colectividad, en personas en circunstancias iguales con un mismo objetivo. Un grupo de personas como se aprecia en el metro, o cuando esperas el  transporte público. Pero hubo un comentario que salió en ese momento que cambio mi manera de percibir  la situación del compañero “famoso” que reconocimos. Ese cometario fue:
“¿Qué clase de universidad es esta que acepta a estas personas adultas? ¿Si acepta a estos individuos? ¿Qué sigue después de esto?”
Reflexioné cinco minutos después del comentario. Pensé que una  persona “famosa” tiene el mismo objetivo que yo, terminar una licenciatura. Al igual que yo,  renuncia a tiempo con su familia, a sus ocupaciones y sus diversiones. Todos los que estamos en la universidad a esa hora. Los adultos, estamos luchando contra todos los pronósticos que indican que no tenemos más oportunidades para progresar como lo tienen los jóvenes de una licenciatura tradicional.
Nuestra misión en la universidad, parafraseando el himno institucional, es aportar a México ciudadanos dispuestos a triunfar, 2 sin importar la edad en que retomen nuevamente los libros. Por eso, considero que los prejuicios son una injusticia y atentan contra la integridad de un ser humano. Los prejuicios pueden hacerlo sentir inferior a alguien o a algo.
Recordemos la declaración de la carta de los derechos humanos1 señala en su primer  artículo:
“Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos y, dotados como están de razón y conciencia, deben comportarse fraternalmente los unos con los otros”.
El hecho de menospreciar a alguien, nos da pauta de comprender cuáles son los valores que hemos adquirido en casa, en la universidad y en la trayectoria laboral. El esfuerzo es algo que caracteriza a cualquier estudiante, y con más razón  el esfuerzo que un adulto debe hacer. Para asistir a clases necesitas tener un espíritu épico para  combinar todas las actividades, obligaciones y responsabilidades. Por eso, en mi opinión, considero que un ejemplo de injusticia es  discriminar a los adultos que retoman sus estudios. Injusticia es que alguien por cualquier causa diferencie del colectivo. Más aún cuando quien critica tiene actividades  comunes a los demás.
Los prejuicios pueden cambiar la imagen de las personas, lo que puede alterar la sana convivencia. De hecho en México en el año de 2003 se creó la:
LEY FEDERAL PARA PREVENIR Y ELIMINAR LA DISCRIMINACIÓN. 3 Reglamento que en el Artículo 4  define la discriminación como  “…toda distinción, exclusión restricción que, basada en el origen étnico o nacional, sexo, edad, discapacidad, condición social o económica, condiciones de salud, embarazo, lengua, religión, opiniones, preferencias sexuales, estado civil o cualquier otra, tenga por efecto impedir o anular el reconocimiento o el ejercicio de los derechos y la igualdad real de oportunidades de las personas. También se entenderá como discriminación la xenofobia y el antisemitismo en cualquiera de sus manifestaciones. En este compendio de 85 artículos, 5 transitorios y un artículo de reforma, señalan  los parámetros en los cuales puedes o no incurrir en acciones discriminatorias.
El comentario del “famoso” expuso claramente la situación común del prejuicio que los adultos retomen los estudios.  Por eso, he de reconocer el esfuerzo que el compañero hace con el solo hecho asistir a clases en lugar de, por ejemplo, pasársela con su familia. Esto puedo tener una lección de vida, lo acepto con orgullo.
Concluyo que este  proceso de aprendizaje fue adquirido en una clase impartida en mi alma mater la: UNIVERSIDAD DEL VALLE DE MEXICO,  “Por siempre responsable de lo que se ha cultivado.”

Bibliografía:

Nivel Educativo ¿Asunto de números?



Mtra. María del Carmen Rodríguez Servín

Mucho se ha manifestado en diversos medios, foros y niveles de gobierno, que nuestro país tiene un rezago educativo preocupante y que se requiere de mayores esfuerzos para incrementar sus niveles.

Ante tal demanda y frente estadísticas que arrojan año con año cifras negativas, se han generado diversas medidas entre las que se mencionan, evitar que los niños a nivel primaria recursen o repitan los grados que no aprueben bajo el esquema de que sean sus padres o tutores quienes se comprometan a suplir esas deficiencias, evitando así la sobrepoblación infantil en este nivel.
También en el nivel secundario se ha propiciado en facilitar a los jóvenes su trayectoria académica aligerando los programas y sus contenidos para que no se retrase “su ascendente carrera educativa”, logrando de esta manera mejorar algunas de las cifras o porcentajes de egreso en este nivel.
En virtud de que esos egresados no satisfacen con su preparación las exigencias del mercado, se decidió una reforma constitucional para incorporar el nivel medio superior a la preparación de esos jóvenes, estableciéndola como obligatoria al  considerar que de esta manera podría elevarse el nivel educativo en nuestro país.
Por otro lado, en busca de subsanar las graves carencias en la educación en México, se ha permitido la apertura de diversas instituciones y colegios, sin embargo, no todas cuentan con los requisitos necesarios, incluso algunas de ellas carecen de registro, en donde el rigor académico con que se cumplen los programas no es tan cierto como fuera de desearse, generando la presencia de egresados de estas instituciones cuya preparación es francamente deficiente.

Con medidas como estas se pretende incrementar el número de egresados de los diversos niveles educativos y con ello la deficiencia terminal, a fin de mejorar las estadísticas en este campo; sin embargo, estas medidas no únicamente agravan el problema educativo de nuestro país, sino que ponen en riesgo la credibilidad de las instituciones que sí cumplen con su tarea de formar a sus estudiantes y profesionistas. No obstante lo expresado no debemos de olvidar que estamos en una época en donde la tecnología y las estadísticas se privilegian.

martes, 29 de mayo de 2012

Un poco del idioma


 Mario Rodríguez López

La democracia de la lengua (fragmento).


“… Me atrevería a sugerir ante esta sabia audiencia que simplifiquemos la gramática antes de que la gramática termine por simplificarnos a nosotros. Humanicemos sus leyes, aprendamos de las lenguas indígenas, a las que tanto debemos, lo mucho que tienen todavía que enseñarnos y enriquecernos, asimilemos pronto y bien los neologismos técnicos y científicos antes de que se nos infiltren sin digerir, negociemos de buen corazón con los gerundios bárbaros, los que endémicos, el dequeísmo parasitario, y devolvamos al subjuntivo presente el esplendor de sus esdrújulas: váyamos en vez de vayamos, cántemos en lugar de cantemos, o el armonioso muéramos en vez del siniestro muramos. Jubilemos la ortografía, terror del ser humano desde la cuna: enterremos las haches rupestres, firmemos un tratado de límites entre le ge y la jota, y pongamos más uso de razón en los acentos escritos, que al fin y al cabo nadie ha de leer lagrima donde diga lágrima, ni confundirá revolver con revólver. ¿Y qué de nuestra be de burro y nuestra ve de vaca, que los abuelos españoles nos trajeron como si fueran dos y siempre sobra una?”.
Tanto revuelo originaron estas palabras de Gabriel García Márquez, que se vio obligado a aclararlas en una entrevista con Joaquín Estefanía, en el diario El País, de Madrid, publicada esa misma semana. He aquí algunas de sus frases: “Mi ortografía me la corrigen los correctores de pruebas. Si fuera un hombre de mala fe diría que ésta es una demostración más de que la gramática no sirve para nada. Sin embargo, la justicia es otra: si cometo pocos errores gramaticales es porque he aprendido a escribir leyendo al derecho y al revés a los autores que inventaron la literatura española y a los que siguen inventándola porque aprendieron con aquéllos. No hay otra manera de aprender a escribir. […] Dije y repito que debería jubilarse la ortografía. Me refiero, por supuesto, a la ortografía vigente, como una consecuencia inmediata de la humanización general de la gramática. No dije que se elimine la letra hache, sino las haches rupestres. Es decir, las que nos vienen de la edad de piedra. No muchas otras, que todavía tienen algún sentido, o alguna función importante, como en la conformación del sonido che, que por fortuna desapareció como letra independiente. […]. No faltan los cursis de salón o de radio y televisión que pronunciaban la be y la ve como labiales o labidentales, al igual que en las otras lenguas romances. Pero nunca dije que se eliminara una de las dos, sino que señalé el caso con la esperanza de que se busque algún remedio para otro de los más grandes tormentos de la escuela. Tampoco dije que se eliminaran la ge o la jota. Juan Ramón Jiménez reemplazó la ge por la jota, cuando sonaba como tal, y no sirvió de nada. Lo que sugería es más difícil de hacer pero más necesario: que se firme un tratado de límites entre las dos para que se sepa dónde va cada una. […]. Creo que lo más conservador que he dicho en mi vida fue lo que dije sobre los acentos: pongamos más uso de razón en los acentos escritos. Como están hoy, con perdón de los señores puristas, no tienen ninguna lógica. Y lo único que se está logrando con estas leyes marciales es que los estudiantes odien el idioma”.


La entrevista se remataba con la repetición de una frase pronunciada en Zacatecas: “Simplifiquemos la gramática antes de que la gramática termine por simplificarnos a nosotros”.

Gabriel García Márquez se ha ganado con sus novelas el título de escritos más fascinante de cuantos han empleado el idioma español en el siglo XX. Y aún le queda el XXI. Pero seguramente no hemos entendido sus digresiones lingüísticas tan bien como su obra literaria.

La frase “simplifiquemos la gramática antes de que la gramática termine por simplificarnos a nosotros” está construida con ritmo y con gracia. Y, sin embargo, no resulta fácil hallarle fundamento. Antes al contrario, cuando simplifiquemos la gramática nos habremos simplificado nosotros mismos.

Para empezar, las normas de los acentos no pueden ser más simples. Se basan en una combinación tal, que una vez conocida no cabe posibilidad alguna de dudar sobre la pronunciación de un vocablo escrito, ni sobre la manera de escribirlo una vez pronunciado.

Parten de que la mayoría de las voces del español son llanas (acento prosódico en la penúltima sílaba) y establecen con arreglo a ello que no llevan tilde las palabras que no la necesitan. Si precisan el acento ortográfico, eso significa que sin él se leerían (y en muchos casos se entenderían) de otra manera.

Cierto que aún se pueden reformar algunos criterios (por ejemplo, ¿por qué “guión” lleva acento si no se lo ponemos a “dio” o “vio”, o “dios”? ¿y por qué “cenit” no lo tiene?), pero la regla general no presenta demasiadas dificultades de aprendizaje. Además, casi nadie escribe cada palabra tras pensar en cuantas normas gramaticales le son aplicables, sino que su correcta ortografía surge limpia desde el fondo de todas nuestras lecturas.

El español ha aceptado en su historia muchas reformas, pero nunca una ruptura con lo inmediatamente anterior. Y siempre decididas por los propios hablantes.

Tales modificaciones resultaban más sencillas siglos atrás, cuando el ser vivo aún se hallaba creciendo y engordando, en periodo de formación y de aprendizaje.
El lenguaje representa lo más democrático que la civilización humana se ha dado. Hablamos como el pueblo ha querido que hablemos. Las lenguas han evolucionado por decisión de sus propios dueños, sin interferencias unilaterales de los poderes; aún más: en un principio han impuesto los pueblos su lengua a los poderes.

La historia de nuestro idioma sirve de ejemplo para comprender cómo los pueblos pueden gobernar sus destinos.

TOMADO DE: Grijelmo, Álex. Defensa apasionada del idioma español. Madrid, Taurus: 1988. 

AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN


Mario Rodríguez López

A propósito del recurso interpuesto por la defensa de Florence Cassez, es conveniente citar la opinión del defensor de la procesada gala, Agustín Acosta.

“El recurso es procedente porque pidió la revisión sobre pronunciamientos del Tribunal Colegiado que interpretaron varios preceptos constitucionales, a saber: artículos 16, 17, 20, 21, 22 y 133. Asimismo, el recurso planteó la interpretación del artículo 36 de la Convención de Viena sobre Relaciones Consulares, que hoy forma parte del llamado “bloque constitucional”. El fallo que hará la Primera Sala es de importancia y trascendencia para el orden jurídico nacional, como se advierte del proyecto mismo de sentencia.”

Ahora bien, en cuanto a la competencia, hace valer el siguiente comentario:
“La competencia del Pleno de la SCJN está puntualmente regulada y no depende de la petición de personas ajenas al juicio o incluso de partes. El Acuerdo 5/2001 de la SCJN, reformado el 6/10/2011, en su artículo 3º, dispone que la remisión a Pleno de un asunto competencia de Sala se dará por acuerdo de la misma Sala competente y cuando el Pleno así lo encuentre justificado.

El artículo 2º del mismo acuerdo, señala que la 1ª Sala es competente para conocer “de las materias penal y civil”. El amparo directo en revisión (ADR) 517/2011 (Florence Cassez) ya fue radicado en la 1ª Sala por razón de especialidad y competencia originaria en marzo de 2011, por lo que no se da el supuesto de excepción.”

REQUISITOS DE PROCEDENCIA QUE DEBEN SER REVISADOS POR EL PRESIDENTE DE LA SUPREMA CORTE DE JUSTICIA DE LA NACIÓN O DE SUS SALAS. Conforme al artículo 90 de la Ley de Amparo, corresponde al Presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación calificar la procedencia del recurso de revisión, admitiéndolo o desechándolo. Por su parte, los artículos 107, fracción IX, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos; 83, fracción V y 93 de la Ley de Amparo; 10, fracción III, de la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación y el Acuerdo número 5/1999, de veintiuno de junio de mil novecientos noventa y nueve, del Pleno de este alto tribunal, disponen que los requisitos de procedencia que deben calificar el Presidente de la Suprema Corte o los de sus Salas son aquellos que pueden ser advertidos de una inmediata apreciación, como son: I. La oportunidad del recurso; II. La existencia de un planteamiento de inconstitucionalidad de una ley o interpretación directa de un precepto de la Constitución Federal (ya sea que se haya planteado en la demanda de amparo directo o que en la sentencia a revisar se hubiera omitido su estudio o se hubiera realizado de manera oficiosa por el tribunal colegiado de circuito); y, III. La falta de legitimación procesal del promovente del recurso de revisión intentado. Lo anterior, en virtud de que tales aspectos son susceptibles de apreciarse inmediatamente, en tanto que aspectos como la calificación de los agravios propuestos y el cumplimiento de los requisitos de importancia y trascendencia requieren forzosamente un estudio profundo del planteamiento realizado, por lo que en tal supuesto corresponde al Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación o a las Salas respectivas, la realización del tal estudio.
Reclamación 115/2006-PL. José Demetrio Tolentino o Demetrio Tolentino Mayorga. 10 de mayo de 2006. Cinco votos. Ponente: José Ramón Cossío Díaz. Secretaria: Laura Patricia Rojas Zamudio.

Reclamación 161/2006-PL. Comisariado de Bienes Comunales del Poblado de "San Juan de Coapanoaya", Municipio de Ocoyoacac, Estado de México. 28 de junio de 2006. Cinco votos. Ponente: José de Jesús Gudiño Pelayo. Secretaria: Carmina Cortés Rodríguez.

Reclamación 323/2006-PL. Ramiro Castro Estrada. 22 de noviembre de 2006. Cinco votos. Ponente: José Ramón Cossío Díaz. Secretaria: Carmen Vergara López.

Reclamación 162/2008-PL. Francisco José Aguilar Bobadilla. 20 de agosto de 2008. Cinco votos. Ponente: Olga Sánchez Cordero de García Villegas. Secretaria: Constanza Tort San Román.

Reclamación 169/2010. Luis Vargas Torres. 30 de junio de 2010. Cinco votos. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretaria: Blanca Lobo Domínguez.

Tesis de jurisprudencia 101/2010. Aprobada por la Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión privada de diecisiete de noviembre de dos mil diez.

Nota: El Acuerdo Número 5/1999, del Tribunal Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación citado, aparece publicado en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Novena Época, Tomo X, julio de 1999, página 92
Registro No. 163235  Localización: Novena Época Instancia: Primera Sala Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta XXXIII, Enero de 2011 Página: 71 Tesis:1a./J. 101/2010 Jurisprudencia Materia(s): Común
El amparo sólo beneficia a quien lo demanda; se trata además de un caso de excepción, ya que la escenificación constituye un caso extremo de inculpación mediática. Es erróneo que este fallo genere impunidad, todo lo contrario. El amparo a Florence Cassez constituiría un dique del poder judicial para que este tipo de conductas indebidas, prohibidas por la Constitución y la ley, se repitan.

¿DEMOCRACIA O VIOLENCIA?


Mtra. María del Carmen
Rodríguez Servín

Los acontecimientos acaecidos en fechas recientes en el mundo y en especial en nuestro país, nos conllevan necesariamente a realizar una acuciosa reflexión en torno a paradigmas históricos como son entre otros, la justicia, la democracia, la libertad. Valores que la Historia Universal ha sostenido como preponderantes para la coexistencia entre los individuos y de los que el Derecho se ha proclamado como defensor y guardián de su cumplimiento.

Sin duda alguna, todos y cada uno de ellos están íntimamente vinculados, pues la existencia de uno, presupone la de los otros. Sin estar en posibilidad por la amplitud y profundidad del estudio a fondo de estos valores, hagamos una sencilla reflexión al respecto.

Nuestro país, como es hecho evidente y conocido, se encuentra en el proceso de elegir nuevos servidores públicos, es decir, presidente, diputados, senadores, presidentes municipales. Proceso electoral que requiere indudablemente del ejercicio democrático del voto por parte de los ciudadanos, siendo de acuerdo a la lógica, exigencia indispensable por parte del elector, el análisis reflexivo de las propuestas de los que pretenden dirigir los destinos de nuestro país.

La democracia debe estar presente en esa elección de dirigentes, es decir en otras palabras, la decisión deberá estar en manos del pueblo. ¿Pero qué ocurre cuando ese pueblo que elige no se encuentra debidamente informado, capacitado, preparado cultural y psicológicamente?

En teoría esas debilidades deben subsanarse con la información de los partidos, de sus dirigentes, de la instalación de foros, documentándose las propuestas de cada aspirante a un cargo, ubicando algunos de esos foros en las universidades, en donde se preparan los futuros profesionales de un país que son la esperanza del cambio cultural. Asimismo, deben organizarse en diversos medios de comunicación, debates en los que se expongan las propuestas de cada partido con objetividad, con argumentos sólidos, cuidando que en estas actividades predomine el diálogo. Diálogo que requiere de que las propuestas sean valoradas por quienes participen, bajo esquemas de responsabilidad.


Hoy, esa necesaria argumentación prácticamente no existe, cuando al presentarse una propuesta o intentar presentarla, quienes acuden a realizarla desde su inicio son descalificados con agresiones, burlas y diversas manifestaciones de rechazo, que según algunos se justifican como expresiones de libertad y democracia ya que sostienen, que es mejor que esas manifestaciones de intolerancia estén presentes, a la no participación de quienes acuden sobre todo tratándose de jóvenes.

¿Pero cuál es la línea, la tenue línea entre la democracia y la anarquía? ¿Entre el entusiasmo y la intolerancia?. Hoy tristemente se ha perdido en aras de un ejercicio “democrático” el respeto a las instituciones, al derecho de expresión de las “minorías”, pues una propuesta para ser respetada, debe ir “avalada” por grandes grupos sin importar cuál es el fondo, la viabilidad, la solidez o fundamento de lo exigido.

Es importante rescatar el que cualquier individuo puede expresarse, situación que va vinculada con algo tan importante como lo es el respeto a los derechos humanos.
Los pueblos, principalmente los jóvenes, deben entender que el derecho de cada individuo termina donde inicia el derecho de otro y que la democracia debe ser acompañada con formas de expresión como son el debate, el diálogo y la argumentación y que debe realizarse sin descalificaciones o violencia, que el derecho del otro a disentir existe y que tener opciones diferentes enriquece, que la intolerancia sólo genera intolerancia, confrontación, enconos, que aunque sean impuestos por la mayoría sin escuchar a las minorías, dará origen a la larga a dictaduras irracionales.

En este sentido los futuros dirigentes deben dar muestra de este ejercicio de verdadera democracia, eliminando las descalificaciones, burlas y enconos que únicamente desvían al electorado o a quien eligen de lo que todos, incluso ellos mismos buscan, que es el alcanzar una mejor forma de convivencia.

Nuestro país, como muchos otros, requiere de una real revaloración y conocimiento de lo que implica la democracia y los derechos humanos para no traspasar el delicado límite entre la libertad y la violencia.

Sembremos en las generaciones la semilla de esos valores que se encuentran fuera de “moda”, que finalmente serán los que permitan se cumpla con una “moda” que es el respeto a los derechos humanos.

Concluiríamos preguntando:

¿Cabe el odio y la violencia en la democracia?

Todavía falta mucho para alcanzar la utopía de la democracia.
Como regla general, no procede la revisión en amparo directo, pero existen excepciones:

Un poco de poesía


Proporcionado por Mtro. Mario Rodríguez López)

¿Qué pasaría?
Mario Benedetti

¿Qué pasaría si un día
despertamos dándonos
cuenta de que somos mayoría?

¿Qué pasaría si de pronto
una injusticia, sólo una,
es repudiada por todos,
todos los que somos, todos,
no unos, no algunos, sino todos?

¿Qué pasaría si en vez de
seguir divididos nos
multiplicamos, nos sumamos
y restamos al enemigo que
interrumpe nuestro paso?

¿Qué pasaría si nos
organizáramos y al mismo
tiempo enfrentáramos
sin armas, en silencio,
en multitudes, en millones de
miradas la cara de los
opresores, sin vivas,
sin aplausos, sin sonrisas,
sin palmadas en los hombros,
sin cánticos partidistas,
sin cánticos?

¿Qué pasaría si yo pidiese
por ti que estás tan lejos,
y tú por mí que estoy tan lejos, y ambos por
los otros que están muy
lejos y los otros por
nosotros aunque estemos lejos?

¿Qué pasaría si el grito
de un continente fuese
el grito de todos los continentes?

¿Qué pasaría si pusiésemos
el cuerpo en vez de lamentarnos?

¿Qué pasaría si rompemos
las fronteras y avanzamos
y avanzamos y avanzamos
y avanzamos?

¿Qué pasaría si quemamos
todas las banderas para
tener sólo una, la nuestra,
la de todos, o mejor
ninguna porque no
la necesitamos?

¿Qué pasaría si de pronto
dejamos de ser patriotas para
ser humanos?

No sé... me pregunto yo:

¿Qué pasaría...?

INFELICIDAD, LA MODA QUE NO ACOMODA *


Mtra. Consuelo Medina Miranda

Libro presentado en el Foro Cultural Coyoacanense, Hugo Argüelles el 27 de marzo, de este año la autora Mayela Pescador Cantón, la suscrita fungió como moderadora, por ello quiero compartirles algunos aspectos relevantes de esta obra.
 El Dr. Edilberto Peña, médico psiquiatra y el Ingeniero en Comunicaciones José Francisco Niembro González Subsecretario de la SSP Federal, combinación sui generis, en la que un psiquiatra una abogada y un ingeniero en comunicaciones presentaran un libro, pero como se denota de su título la infelicidad  o felicidad a contrario sensu es para todos los profesionistas o no estudiantes, jóvenes, adultos, ricos, pobres, guapos feos, mujeres hombres etcétera, etcétera, para todos los seres humanos.
Por ello los participantes en esa mesa, ilustres mexicanos, que desde el área profesional en la que se desarrollan,  a través de velar por la seguridad pública o por procurar nuestra salud emocional, cuidan de nuestra felicidad, pero como dice la autora: la felicidad depende de cada uno de nosotros.
Apreciamos en esta obra que Mayela Pescador, preocupada y ocupada por la crisis de valores que se está viviendo actualmente, escribe este libro que nos sensibiliza y abre los ojos de una manera sencilla y amena a una realidad que podemos mejorar.
Ella observa de la vida cotidiana la forma de vivir, de personas como cualquiera de los que estamos leyendo esta gaceta, y a través de historias breves nos hace identificar a algún conocido o a nosotros mismos, en alguna de estas situaciones que en cualquier etapa de la vida como lo plasma, desde la niñez, la adolescencia, la madurez o la tercera edad, se pueda vivir infelicidad. Ella es muy observadora y nos hace percibirnos y tomar conciencia de estas situaciones cotidianas pero profundas.
También nos brinda información básica de aspectos relevantes como por ejemplo los factores que causan baja autoestima (pag. 23) desde los primeros años de vida; el alcoholismo o el embarazo en los adolescentes, o el papel que desempeñan los padres de hoy en un mundo de consumismo y sin límites y como, sin responsabilidades ni obligaciones para los hijos, pretenden que sean “FELICES”, por estar a la moda y por el contrario los hacen infelices, por lo mismo porque no les enseñan valores fundamentales y universales, y sobre todo no  les recuerdan que la felicidad no es exterior, sino que está dentro de cada uno por sus valores, pero nadie puede dar lo que no tiene y así lo ilustra con excelentes historias de infelicidad de jóvenes adultos que algún día fueron niños y adolescentes carentes de valores. Pero lo bueno es que en este libro también ilustra la autora que en la tercera edad se es más feliz que en la juventud, No nos esperemos a llegar a esa etapa (aunque algunos ya estemos más cerca) Y seamos desde ahora felices, aprendiendo de las historias que nos narran en este libro.
Autora: Mayela Pescador
Así mismo, debo mencionar otro aspecto importante del libro: y es que analiza temas nuevos para muchos de nosotros, conceptos como: el bulling, las redes sociales, los valores en el face; la tecnología de la información  que ha venido a cambiar las relaciones sociales, el sexting, temas como el “free” o “los novios” con derechos de esposos, pero sin las obligaciones contractuales que implicaría un matrimonio, la infidelidad cibernética, entre otros.
“Infelicidad la moda que no acomoda, invita a la reflexión, y a retomar la esencia única y personal, la lucha por lo que realmente representa la felicidad para cada uno, no importando que esté o no de moda. A tratar de evitar vivencias fáciles y pasajeras que solo dejan más vacío y encontrarse a sí mismo. A su auténtica realidad…”
Y claro, también nos recuerda valores universales y siempre vigentes, como la fidelidad, el amor, la amistad, la solidaridad, que representan los que sí dan felicidad.
(Puede solicitarlo en el D.F. 4327-7715 o www.palibrio.com). De venta en librerías El Sótano.  

Estructuras y dualidad de las estructuras, Orden, Poder, Conflicto, y Luchas Sociales, según algunos teóricos de la Sociología.


Mtra. Sara Esteban Cabrera
La teoría de la estructuración. Se  puede abordar como un análisis de las estructuras en sociología, comparando lo que llamaré ahora simplemente el habla (acción e interacción) con el lenguaje (estructura), este último es una propiedad abstracta de una comunidad de parlantes, ello no es una analogía, definitivamente no pretendo sostener que la sociedad es como un lenguaje, el habla está situada, es decir, que está espacial y temporalmente ubicada, mientras que el lenguaje tal como lo señala Ricoeur, es virtual y está fuera de tiempo, el habla presupone un sujeto, mientras que el lenguaje es específicamente carente de sujeto, si bien de hecho no existe más que en cuanto es conocido y producido por sus parlantes, el habla siempre reconoce potencialmente la existencia del otro, su relevancia para facilitar el intento comunicativo es fundamental, pero también es el medio internacional, las prácticas son los procederes situados de un sujeto, las estructuras no tienen ubicación socio-temporal. Es la reproducción de las prácticas, se refiere abstractamente al proceso dinámico mediante el cual las estructuras llegan a existir.

La producción y reproducción de la vida social. Tal como los individuos expresan su vida así es como son. Lo que son, por consiguiente, coincide con su producción, tanto con lo que producen como con el modo en que producen, pero la producción ha de ser entendida en un sentido muy amplio, la producción o constitución de la sociedad es una obra práctica de sus miembros, toda reproducción es necesariamente producción, cada acto contribuye a la reproducción de cualquier forma ordenada de vida social. El lenguaje o la comunicación El lenguaje entra en un proceso de producción y reproducción.
Orden, poder, conflicto y dualidad de las estructuras.: En el mundo social está diferenciado del mundo de la naturaleza esencialmente por su carácter moral.

La resolución del problema del orden tiene cuenta, por supuesto, la existencia de tensiones y conflictos en la vida social, el esquema teórico de Talcott Parsons no ofrece lugar para los conflictos de intereses, hay un punto de partida entre la integración de propósitos y valores es la base principal de su propuesta resolución del “problema del orden de Hobbes”, definido en función de la conciliación de intereses diversos y divergentes, el choque de intereses existe en tanto un orden social no es capaz de hermanar los propósitos de los diversos miembros de una colectividad con la integración de patrones de valor en un consenso internamente simétrico, y en esta medida el conflicto e intereses según esta concepción nunca llega a ser algo más que un choque entre los propósitos de los actores individuales y los intereses de la colectividad.
El Orden, desde este ángulo, depende de la centralidad de una tensión que se concibe existente entre el egoísmo y el altruismo, un problema que se refiere a la reconciliación de los intereses de los actores individuales con la moralidad social, la interpretación característica del orden como consenso moral aparece muy tempranamente en la obra de Parsons, Weber lo entiende como un sistema normativo, para Parsons es ciertamente el de una regulación normativa, un problema de control, es como la antítesis de caos.
Poder se puede fundar con el vocabulario la interpretación de los valores consensuales socialmente organizados y los motivos. El poder presupone el conflicto, puesto que el poder solo existe cuando la resistencia de los otros tiene que ser vencida y sometida a la voluntad
Las características no explicadas de los sistemas de interacción que promueven y permiten el ejercicio de tales capacidades, las que pueden ser analizadas como elementos de motivación y que llamaremos “dualidad de las estructuras”.
Al referirme a la dualidad de las estructuras debemos entender que las estructuras sociales son constituidas por la actividad humana, y son aún, al mismo tiempo, el medio mismo de esta constitución.
La dualidad de la estructura en la interacción social se puede presentar de la siguiente forma: interacción-comunicación.

La hambruna es un problema de injusticia nacional


Por Mayra Alejandra Chávez
El término justicia ha sido una palabra indefinible a lo largo de nuestros tiempos, y es por ello que tanto se filosofa de la palabra en sí. Siendo de esta manera, todo depende en concepto, de los ojos con que se mira, a través de qué espejo, y de lo que como individuos consideramos ética y moralmente correcto. Y en este ensayo se ha de considerar que el tema de la hambruna, que es un tópico que no todos los días se trata, pero que en general creo, todos consideramos como una injusticia.
Según el Lic. Edgar Martínez Cruz en su artículo  ¨La Justicia¨, basado en la doctrina de Hans Kelsen, afirma que desde la época romana, la Justicia ha sido representada por la diosa Themis, que se presenta con el aspecto de una noble mujer empuñando en todo lo alto la espada de la ley, sosteniendo con la otra mano la balanza de la equidad y manteniendo siempre los ojos vendados en señal de imparcialidad. Esto es, que deja caer la fuerza de la espada sobre quien trate de desequilibrar la balanza, no se detienen a observar las particularidades del individuo, ni le importa que sea joven o viejo, rico o pobre, enfermo o sano, blanco o negro, virtuoso o criminal.
Pese a esta imagen tan pulcra, es extraño que en el mundo actual se pueda concretar el término y vivir en una permanente justicia.
Hay varios factores que hacen que se genere una confusión universal, como los excesos de la vida contemporánea. Así, la Organización de los Derechos Humanos los enumera de esta manera:

1) El deseo irrefrenable de poder y gloria de algunas personas o pueblos.
2) Las ansias ilimitadas de riquezas y lujos.
3) La carencia total de este y otros valores como: honradez, pulcritud y respeto hacia los demás.

     De lo que estoy segura, es que la hambruna es una injusticia para quienes la padecen. No puedo concebir como algo lógico que alguien lo considere  como algo justo. No es posible desde ningún punto de vista, ni social, ni económico, ni político.

     La hambruna es un padecimiento que se vive a nivel mundial. No es necesario observar tan afuera de nuestras fronteras. En nuestro bello México también se vive y sigue siendo latente aún en nuestros días. Hoy, en este mismo día.

     México enfrenta también a la hambruna. Sería una excelente idea que nuestro gobierno creara y aplicara realmente estrategias de desarrollo económico y social a largo plazo, y no solo planes estratégicos para un sexenio.

     Es una realidad que nuestro país está viviendo un problema grave debido a que la mitad de él vive en pobreza, pero no hay que olvidar que un quinto de la población se encuentra en pobreza extrema.

    De acuerdo a la organización de la FAO, a nivel mundial hay 800 millones de personas que mueren por hambre, 3 millones de hogares en situación de pobreza alimentaria en México y en nuestro país la pobreza no solo genera hambruna, también carencia de capacidades y de patrimonios.

    En conclusión, la hambruna es un problema latente que en nuestros días es difícil aceptar, pero como ciudadanos Mexicanos debemos poner un granito de arena para dar solución al problema. Tener hambre y que la tengan los niños, son problemas tan graves que frenan el desarrollo del país. Los infantes son el futuro de la sociedad. Si hay hambre, no hay estudio, no hay crecimiento, no hay futuro; y ciertamente, no hay justicia.

    En mi opinión, si la diosa Themis apareciera en México, rodaría la cabeza de mucha gente irresponsable que olvida los verdaderos problemas del pueblo.

Bibliografía: 

Fuentes citadas. 5 Marzo 2012.

Juicios Orales ¿Justicia Ligth?


Por Mtra. María del Carmen Rodríguez Servín


Si bien es cierto que el Poder Judicial no se caracteriza por la prontitud en la solución de conflictos, no obstante los denodados esfuerzos realizados, lo es también el clamor de la ciudadanía, porque esta impartición no sólo sea expedita sino también cumpla con lo que busca que el Derecho, es decir, imparcialidad, equidad, justicia.

La respuesta del legislador a esa demanda ciudadana generó “se crearan” los llamados juicios orales, cuyos antecedentes en los países sajones son añejos al igual que la tradición y experiencia en los mismos. Pero analicemos con mayor detenimiento ésta “nueva” modalidad en este ámbito, refiriéndonos a la más reciente modificación normativa en el campo mercantil.

El 27 de enero de 2011, se reformaron, adicionaron y derogaron diversas disposiciones del Código de Comercio como sigue: “Artículo Único”. Se reforman los artículos 1464 a 1480, que comprenden el Capítulo X, “de la intervención judicial en la transacción comercial y el arbitraje”; se adicionan los artículos 1067-bis; 1339-bis; y un título especial, que se denominará “del juicio oral mercantil”, que comprende los artículos 1390-bis a 1390-bis 49 y derogan los artículos 1460 y 1463, Segundo Párrafo”.

Con estas reformas legislativas según su exposición de motivos el legislador fue en busca de dotar al Poder Judicial de leyes e instrumentos que le permitieran estar en consonancia con las demandas de justicia, para poder brindar solución a las controversias judiciales.

Cabe agregar que estas modificaciones al Código de Comercio dejan a salvo los asuntos que cuentan con tramitación especial en el propio Código, los ejecutivos mercantiles, especiales de fianzas y ejecución de prenda sin trasmisión de la posesión.
En la exposición de motivos también se señala que:

- Habrá acceso a la justicia en igualdad de condiciones a personas con capacidades diferentes y a grupos vulnerables mediante la designación de intérpretes para personas que no puedan hablar, oír, padezcan invidencia o no hablen el idioma español, con lo cual se garantiza el efectivo acceso a la justicia. Cabe comentar que la vulnerabilidad no sólo se manifiesta en este sentido sino también en la falta de recursos para una adecuada defensa o al desconocimiento de las leyes lo que sabemos es frecuente, como se comentará más adelante para fortalecer lo expresado.
- En este procedimiento el Juez rector principal del mismo, estará dotado de las más amplias facultades para mantener la disciplina y el orden en las audiencias por lo que podrá hacer uso de la fuerza pública, determinar recesos, limitar el acceso al público, entre otras.

- Se suprimen las notificaciones personales a excepción del emplazamiento teniendo como hechas las notificaciones de los acuerdos pronunciados en las audiencias, aún cuando no acudan las partes.

- Se dota al juez de facultades de dirección para efectos de conciliar a las partes,  sancionando la inasistencia de las mismas.

- Se instituye una audiencia preliminar para depurar el procedimiento en donde el juez intervendrá directamente para conciliar a las partes y fijar acuerdos no controvertidos

- El juicio se realizará en una sola audiencia (audiencia de juicio).  Se utilizará el registro tecnológico de las audiencias sin desechar las tradicionales llegándose un registro de las mismas y levantándose un acta que describa lugar, fecha, asistentes y asuntos.


Adentrándonos de manera general a las modificaciones normativas tendremos que:
° El juez contará con las más amplias facultades para decidir en forma pronta y expedita lo que a su derecho convenga con uso de las medidas de apremio previstas en el Código de Comercio en los artículos 1067-bis y 973 del C.P.C.
° En cuanto a los asuntos que se ventilarán serán aquellos de naturaleza mercantil cuya suerte principal sea inferior a $ 220,553.48 que se actualizará anualmente.
° Las diligencias de desahogo de pruebas que se verifiquen fuera del juzgado serán precedidas por el juez y registradas por personal técnica por cualquiera de los medios establecidos en el artículo 1390-bis 26 del Código de Comercio y 974 del Código de Procedimientos Civiles.
° Las promociones de las partes deberán formularse oralmente durante las audiencias. No se admitirán promociones frívolas o improcedentes ya que estas se desecharán de plano debiendo fundarse y motivarse la decisión, artículo 1390-bis 8 del Código de Comercio.

La recusación del juez será admisible hasta antes de la admisión de las pruebas en la audiencia preliminar. En caso de declararse fundada se declarará nulo lo actuado a partir del momento en que se interpuso la recusación. Artículo 1390-bis 7 del Código de Comercio y 976 del Código de Procedimientos Civiles.
Una vez señalados algunos de los artículos contenidos en la normatividad que le brinda marco al juicio oral mercantil estaremos en posibilidad de hacer algunos comentarios al respecto e insistir en las características del mismo, haciendo a la par referencia de algunas implicaciones que conlleva la oralidad en los juicios mercantiles.
El juez rector principal de este procedimiento deberá ser una figura que conozca profundamente los trámites que realice un uso diligente del tiempo procesal, que presencie las audiencias, que sea conciliador de las pretensiones de las partes y que brinde soluciones realistas y con apego a la justicia. Aunado a estas virtudes tendrá que interactuar con las partes y terceros que participen en el proceso tomando decisiones frente a ellos.
Por su parte el abogado que participe en el proceso oral, tendrá un papel muy importante puesto que buscará justificar su intervención de manera dinámica sustentando argumentaciones sólidas para enmarcar las pretensiones de quien representa frente a la contraparte, al juez y a terceros. Asimismo deberá tener contacto directo con el juez y las partes, expresando con claridad verbalmente sus argumentaciones ante ellos y el público presente en las audiencias. Todo ello con un profundo conocimiento de la legislación sustantiva y procesal, demostrando su ética y prestigio profesionales.

Las partes deberán colaborar en la búsqueda de la verdad, además de seleccionar cuidadosamente a quien hará la defensa de sus intereses.
Los terceros, peritos y testigos tendrán que cuidar el omitir actitudes o conductas que obstaculicen los fines del proceso y colaborar con actos positivos para alcanzar la verdad de los hechos.
Como se desprende de las fortalezas que deben tener los sujetos que participan se requerirá de características que hasta hoy difícilmente se han podido lograr.


Llama la atención a la vez que no deja de generar inquietud la carga procesal a que se somete al juez que ha de conocer el asunto, evaluar las probatorias, platicar con las partes, interactuar con los litigantes, analizar las testimoniales, escuchar a terceros, presenciar y dirigir la conciliación con los participantes en el proceso y luchar con el tiempo requerimientos y habilidades que hacen de esta figura el que requiera de aptitudes casi excepcionales, situación que puede derivar en  que, en ocasiones, los procesos no logren madurar en los tiempos asignados en perjuicio de alguna de las partes.

Algunos argumentarán que cómo se logra esta situación en otros países, a lo que podríamos contestar que al igual que en otros campos en que se alcanzan objetivos en los mismos, en México aún son aspiraciones; debe agregarse a este aspecto que la cultura y tradición procesal en nuestro país ha sido diferente.
Aunado a lo anterior, estos procesos son uniinstanciales y cualquier inconformidad de alguna de las partes tendrá como destino el amparo directo, instancia que a la fecha resulta más compleja.
En cuanto a las partes, recurrirán a estos procedimientos (como es sabido, por lo menos una de las cuales será comerciante), pondrá en muchos casos en desventaja a la que sea de naturaleza civil (particular), frente a la que se dedique a actividades de carácter comercial, ya que la primera contará evidentemente con menor experiencia en estos asuntos, asesoría profesional (pues es sabido que las defensorías de oficio a la fecha tienen muchísimas deficiencias) y no está acostumbrado a este tipo de situaciones que le impondría acudir a una audiencia con la presencia de un juez, una parte contraria y ante un auditorio a dirimir sus asuntos.
Por cuanto a los abogados que hagan su defensa, es una realidad que el aspecto económico (honorarios) influye en la posibilidad de alcanzar la defensa de un despacho prestigioso o tener un litigante de cuño más reciente, situación que también pondrá en desventaja a la parte más débil, económicamente hablando.

Puede argumentarse que igual ocurriría en un procedimiento escrito, sin embargo, al contarse con una segunda instancia, una oportunidad ante un tribunal de alzada, se estará ante la alternativa de que la sentencia sea valorada con una visión diferente de experiencia que verifique que se está ante la verdad jurídica.

Los terceros y los testigos que participen en un proceso oral se encontrarán bajo la presión de un interrogatorio ante una audiencia, lo cual generará un gran apremio por la presencia de la parte contraria e incluso del propio juez.
Seguramente se argumentará que no hay algo nuevo en todo lo expresado; sin embargo, habrán de realizarse estos juicios orales, sobre todo en sus inicios, bajo esquemas estrictos que requieren nuevas exigencias como son: la tolerancia, el respeto, la precisión y concisión en el lenguaje, la agilidad mental, la memoria, el conocimiento de quienes tengan a su cargo las decisiones y argumentaciones en estos procesos (la triada), para garantizar el manejo de un discurso argumentativo, fluido, elocuente y sólido, apegado en forma estricta al derecho, de lo contrario, se estará ante el riesgo de impartir una justicia “fast track”.

Si bien es cierto que la oralidad en los juicios ofrece una alternativa ante el rezago judicial, también lo es, que representa un factor de riesgo por lo expresado, ya que se puede estar ante la presencia de una justicia “light” que abata el número de expedientes rezagados, pero que favorezca a algunos en perjuicio de otros.

La Nueva Clase Política en México


Por Mario Rodríguez López

La incontinencia verbal de que adolece la mayoría de los “políticos” en nuestro país, obliga al mesurado análisis de quienes son receptores de sus discursos.

Con independencia de su iletrada participación en eventos diversos que exigen una meridiana preparación, su modesto intelecto da muestra de escasa cultura y, sobre todo, de habilidad ausente que pueda favorecer alguna respuesta oportuna y convincente.

Hace tiempo escasean en el ámbito nacional los personajes que hacen gala de su conocimiento sobre los problemas que han afectado a la sociedad mexicana, aunado a la destreza con la que proponen soluciones tangibles y verosímiles.

La calidad humana, la reputación adquirida en su vida personal, el prestigio acumulado en su trayectoria pública, la pertinencia al emitir sus opiniones, la sensatez de sus respuestas y la elocuencia matizada por el dominio del idioma, es desconocida actualmente por millones de jóvenes quienes son víctimas de la contaminación que la “nueva clase política” ha impuesto en las justas electorales recientes.
Campañas que se caracterizan por denostar a los adversarios al emplear la calumnia como eje rector de su argumentación; candidatos que aseguran satisfacer demandas ciudadanas aunque, de antemano, saben que no podrán cumplir por ser materialmente imposible en las condiciones económicas actuales; demagogia recalcitrante en sus mensajes a la población; nepotismo a ultranza que genera mayor desconfianza; todo ello atenta contra la inteligencia de los votantes.

Es menester que cada aspirante presente un programa definido de gobierno con propósitos plausibles, pero a la vez tangibles y mensurables, ya que solo de esta manera estaremos posibilitados para emitir un sufragio que garantice el ejercicio de este derecho.